Guía para alcanzar un reciclaje eficiente de residuos
Una adecuada gestión en el tratamiento de residuos y el reciclaje dentro de la organización implica un sinfín de beneficios para ésta. Además de optimizar la utilización del espacio en el lugar de trabajo, supone un significativo ahorro de costes, consecuencia directa de la reducción de la generación y recolección del desperdicio, y las ganancias procedentes del reciclaje del mismo.
A estos beneficios, habría que sumarle otros como: ahorro de tiempo en la manipulación de residuos, ahorro energético, mejora en la gestión relativa a la prevención de riesgos laborales (PRL), mejora de la percepción pública de la empresa, reducción del impacto ambiental en el entorno y comunidad, etc.
Todo ello nos lleva a entender el correcto manejo de los residuos in situ como uno de los puntos clave para que nuestra empresa – independientemente de su actividad y tamaño – mejore y se convierta en un negocio más circular y sostenible.
4 consejos para mejorar la gestión de residuos
1. Elabore un plan
Comencemos por identificar los tipos de residuos generados por nuestra actividad empresarial para, a continuación, determinar cuál es la mejor forma de gestionarlos en función de su naturaleza (cartón, plástico, cartón, PET, aluminio, etc.). No debemos olvidar, antes de definir cualquier proceso, estar al corriente de la normativa vigente en materia de gestión de residuos para asegurarnos de cumplirla.
Ahora sí, es el momento de decidir los métodos y soluciones que vamos a implementar en nuestra empresa para la recolección o eliminación de cada tipo de desecho. Incluyamos en nuestro plan, por ejemplo, tareas de compactación y clasificación de residuos. Por último, pero no menos importante, comuniquemos a todo el equipo nuestro plan de residuos, su importancia y el papel que cada uno desempeña en él.
2. Segregue en origen
Separar los residuos en el lugar donde se producen nos permite minimizar el esfuerzo y los tiempos dedicados a su manipulación y reciclaje. Clasificar los materiales desechados en función de su naturaleza (cartón, papel, plástico, PET, vidrio, botes de aluminio, bidones, neumáticos, etc.) evita que nos encontremos ante enormes pilas de residuos (generales y/o reciclables) mezclados que clasificar en el momento de su recogida.
En este sentido, la introducción de soluciones como los bastidores y bolsas de residuos grandes Longopac, las prensas y compactadoras de residuos LCC o los compostadores automáticos son estupendas alternativas para incluir en nuestro plan de residuos y poner en marcha en las instalaciones de nuestra organización.
3. Mantenga las prensas cerca
Si nuestra organización genera grandes volúmenes de residuos, la mejor opción es introducir una o varias prensas para su compactación – en función de nuestras necesidades – en una zona próxima al área de separación y recogida. De este modo, evitaremos múltiples viajes innecesarios. Una prensa compactadora de cartón (y otros materiales) es indudablemente necesaria para mejorar la logística de residuos de la empresa.
Si, por poner un caso práctico, nuestras prensas se accionan un par de veces al día, podemos considerar usar la cámara de la prensa como punto de recolección de residuos. Al cargar directamente las cajas de cartón vacías, evitamos tener incómodas y peligrosas torres de este material en nuestras instalaciones. Quedando el material desechado listo para minimizar/ compactar y ser trasladado a la planta de reciclaje en cualquier momento.
4. Papel siempre que sea posible
En la medida de lo posible intentaremos seleccionar productos cotidianos – platos, bolsas, vasos, embalajes, etc. – fabricados en papel para mejorar nuestra gestión de residuos. El papel es uno de los materiales más fáciles de compactar. Esto significa que podemos minimizar mayores volúmenes de papel en una única bala (ahorro de energía, tiempo, espacio, dinero…). Además, por lo general, el papel es completamente reciclable, lo que nos permite mantener todos los desechos fuera de los vertederos e incluso hacer negocio, vendiéndolos a plantas especializadas en su recuperación.